Sé que tú me ayudas, Dios.
Dios, necesito de tu paciencia,
que ese fruto tan deseado de tu Espíritu se refleje en mí,
este dolor pareciera no tener fin,
siento que me hundo cada vez más en él,
pero sé que has escuchado mi petición de liberación.
Dios, dame oídos sensibles a tu voz de amor,
sé que en ti está la fuerza para vencer,
mírame con tu bendición y sácame de la desesperación,
sana mi mente, mi cuerpo, mi corazón,
dame nuevamente la alegría de vivir,
de luchar, de compartir.
Dios, tu ayuda en mí lo verán muchos
y confiarán en tu grandioso amor,
sana mis heridas, dame tu luz,
sostenme con tu mano dulce y tierna,
defiéndeme de mis opresores,
que con valentía enfrente la vida
porque contigo siempre tengo la salida.
Dios, necesito de tu paciencia,
que ese fruto tan deseado de tu Espíritu se refleje en mí,
este dolor pareciera no tener fin,
siento que me hundo cada vez más en él,
pero sé que has escuchado mi petición de liberación.
Dios, dame oídos sensibles a tu voz de amor,
sé que en ti está la fuerza para vencer,
mírame con tu bendición y sácame de la desesperación,
sana mi mente, mi cuerpo, mi corazón,
dame nuevamente la alegría de vivir,
de luchar, de compartir.
Dios, tu ayuda en mí lo verán muchos
y confiarán en tu grandioso amor,
sana mis heridas, dame tu luz,
sostenme con tu mano dulce y tierna,
defiéndeme de mis opresores,
que con valentía enfrente la vida
porque contigo siempre tengo la salida.